Se que sonara un poco exagerado lo que estoy a punto de decir pero habían pasado un poco más de cinco semanas del viaje y necesitábamos un pequeño descanso, uno sin itinerario que cumplir donde el único plan seria existir. Fue así como decidimos despedirnos de Tailandia conociendo una de sus hermosas islas. “Bienvenidos a Phuket”. Estábamos a escasos minutos de aterrizar y la vista era paradisiaca con el agua azul y cristalina de las playa como pocas veces se puede observar, en México sólo podría compararla con Cancún.
Al llegar quedé sorprendida al ver que los anuncios se encontraban en tres idiomas inglés, tailandes y ¿ruso? Que esto no tiene sentido. Rusos visitando a la gente amable y sonriente de Tailandia ¿con qué sentido? La única explicación es que les roban sus almas para que tras un ritual, que estoy segura que involucra vodka, caviar y osos, algún día puedan sonreir ”los rusos no son felices nada en esta vida los hace sonreir”.
Llegamos a la playa y era aún más hermosa. Podía sentir cómo las su agua cristalina me invitaba a disfrutarla pero también una cerveza me invitaba a tomarla, spoiler alert ganó la cerveza. Ahí estaba yo tirada disfrutando de mi cerveza y la soleada tarde, la vista era casi perfecta a no ser por las chicas rusas con sus cuerpos de barbies pálidas y sus pequeños bikinis “estúpidas rusas nadie quiere verlas” ¿verdad Geo? ¿Geo? ¡Geoooooooooo! Así fue como regresé sola a México porque que Geo me dejo por una rusa ¡fin del blog!
Cuando pensé que la vista ya no podía ser peor aparecieron los machos rusos con sus diminutos calzoncillos ¡oh Dios porque lo hacen! No entiendo cómo usar pequeños calzoncillos encaja con la imagen de rusos agresivos, estoy segura que su babushkas no estaría orgullosa de eso. En ciertos lugares de Asia es fácil observar una raza predominante de turistas, en Phuket eran los rusos que les encanta ir a gastar sus rus- pesos a cambio de un poco de sol para poder presumir sus ruso-cuerpos.
Visitamos Phuket en febrero me imagino que Rusia debe ser aún más frío en esas fechas. Es por eso que los rusos deciden visitar la playa y de alguna u otra manera tratar de absorber los únicos rayos solares que tendrán en el año, es por eso que sólo puedes verlos ahí parados o sentados tomando un poco de vodka sin hablar, sin reír, sin hacer nada solo viendo con cierto recelo a la playa estoy segura de que solo pensaban глупый пляж para los que no hablen ruso es claro que eso significa “estupida playa”.
La tarde cedió paso a la noche y era momento de ver el lado fiestero de los rusos “vamos rusos ponganle azúcar”. Ok, su cara es exactamente la misma que tenían en la playa ¡simplemente no saben sonreír! Phuket tiene dos grandes atractivos de noche y uno de ellos es el mercado nocturno donde en su mayoría disfrutaras de deliciosa comida, las opciones de comida son amplias por una parte puedes escoger mariscos que te preparan al momento, dejarte seducir por el pollo frito o simplemente seguir probando la comida local. Los postres en Tailandia no te invitan a probarlos ya que la vista no es su fuerte pero juro por la infelicidad de los rusos que son deliciosos sobre todo mi coco relleno de nieve de coco cubierto de coco ¡lo ame!
La otra diversión nocturna de Phuket es una calle llamada Bangla Road, en Patong, donde se hacen realidad todas las historias locas que han escuchado de Tailandia y la calle a donde todo el mundo quiere llegar. Imaginen ir caminando por la calle decidiendo a qué bar entrar mientras ves a las chicas bailando en la barra y si tu presupuesto es corto ni siquiera tienes que comprar cerveza en el bar para disfrutar del show ya que puedes comprarla en el 7 Eleven y tomarla en la calle ¡gracias Asia por dejarnos beber en la vía pública! Mientras recorriamos la calle, había gente que ofrecía vivir un poco de realidad virtual o ponerte a prueba en retos que era un hecho que perderias como mantenerse colgado de los brazos por dos minutos vimos perder fácilmente a 10 personas en menos de 10 minutos.
Como les comente al principio Phuket es una encantadora playa donde podrás disfrutar de sus aguas cristalinas, recorrer los centros comerciales, dar un paseo por el mercado nocturno para alimentarte y perder todo tu dinero en Bangla Road, para mi tres días fueron suficientes para disfrutarla.
PD. Geo si estas leyendo esto, espero que seas feliz con tu nueva babushka.
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