Praga es la capital de República Checa que visitamos en invierno del 2012. Definida en mi diccionario como “lugar de los Pragueños”. Claro que también tengo la definición de Pragueño como “gente absurdamente atractiva”, tal vez puedan estar en desacuerdo con esto pero no me juzguen era la primera vez que salía de México.
Primer día
Una de las cosas que no debes dejar de hacer si visitas Praga es probar un salchicha acompañado de un vino caliente que encontrarás en los carritos callejeros una opción económica y deliciosa. Lo que no debes hacer es ¡alimentar a las palomas! a menos de que busques que las persona que trabajan en el carrito te vea con cara de desaprobación y un montón de palomas hambrientas estén picoteando los zapatos.
Después de alimentar a las palomas continúe con mi recorrido por el centro de Praga, uno de los lugares que tienes que visitar es el reloj astronómico y subirte a la Torre del Reloj que también funciona como mirador.
Caminar de noche por el centro histórico de Praga es una experiencia muy agradable, romántica y tranquila ¡si todo eso!, los callejones obscuros de cierta manera me hacían sentir como en una película (y no era Hannibal).
No estuve mucho tiempo en Praga pero sin duda el tiempo que estuve fue bien aprovechado. La comida y la cerveza son muy buenas en Praga y uno de los lugares que debes visitar es U Fleku la cervecería más antigua de Praga, el ambiente del lugar es muy agradable tienen un concepto de mesas compartidas el cual es muy común en Europa. Un recuerdo muy especial que tengo de ese lugar es un señor con un acordeón tocando Cielito Lindo, una canción que al escucharla fuera de México acompañada de una cerveza me hizo sentir un poco de nostálgica. Pero no se preocupen la nostalgia desapareció cuando a lo lejos vi que el mesero se acercaba con más cerveza. Si ven pasar al mesero con una charola llena de shots no lo duden ¡pruébenlos!, sin duda gozaran de un sueño reparador.
Segundo día
Después de ese sueño reparador del que hable era momento de visitar el castillo de Praga. Llegar en transporte público no es difícil solo tienes que comprar los boletos en cualquier estación del metro antes de subir al camión. ¡Recuerda ahorra utilizando el transporte público y el ahorro gástalo en comida y bebida!. El castillo es hermoso y recorrerlo vale la pena, durante el recorrido podrás visitar la iglesia, algunos museos y las casas en los que podrás apreciar los detalles de arquitectura y pintura, me gustaría describir estos detalles con palabras elegantes pero mis conocimientos de arquitectura son nulos, como turista les puedo decir que te brinda una excelente vista para apreciar la ciudad y tomar fotos que posteriormente podrás presumir a tus amigos y si tienes suerte verás marchar a los soldados, en realidad es algo muy común solo quería verme importante.
Una de las cosas que me encanta hacer cuando estoy conociendo una ciudad es caminar y caminar, en invierno es complicado por el frío que hace, literal me dolía respirar cuando sentía que aire helado atravesaba ni nariz pero para todo hay una solución vino caliente simplemente hace más amena la caminata. Era mi segunda día en Praga y estaba ansiosa por conocer y la siguiente parada era el puente de Carlos es el puente más viejo de Praga y el segundo más viejo de República Checa, gracias Wikipedia por dejarme ver intelectual. EL puente no está muy largo realmente el tiempo que tardes en recorrerlo depende de la atención que prestes a las estatuas, el arte callejero y las fotos que quieras tomarte, sin duda un lugar que tienes que visitar.
Tercera parada el barrio Judío en Praga todos los recuerdos que tenía de este lugar se vieron nublados por una sola cosa ”las finísimas y carísimas tiendas que se encuentran en este barrio”, en este tipo de tiendas los escaparates son elegantes y mucho más elaborados de los de las tiendas que estoy acostumbrada a ver, de hecho recuerdo cuando le pedí a Geo que me sacara una foto y ahora pienso en lo turista que me deje ver.
Después de tanto caminar estaba hambrienta necesitaba comer y desafortunadamente en Praga no había tacos o tamales así que opte por probar platillos típicos de Praga, si están fuera de México por favor ¡No busquen comida Mexicana!. Les presento el Goulash un platillo en mi caso de carne de res bañada en una salsa adobadita acompañado de pan blanco y pan de centeno, adornado de rodajas de cebolla.En algunos lugares los sirven en plato y en otros dentro de un pan a mi me toco probar las dos, el Goulash dentro del pan y el chamorro los probamos en el restaurante Mlejnice.
A estas alturas Geo literal tenía un apetito feroz y para demostrarlo les dejo esta sexy foto en la cual se puede apreciar el chamorro cocido a la perfección acompañado de mostaza, rábano molido y rodajas de cebolla.
Para cerrar el día era necesario tomar una cerveza esperando que me hiciera el mismo efecto que el día anterior y disfrutar de un sueño reparador, ahora que lo pienso no eran las cervezas era lo cansada que estaba. Terminamos en este bar tomamos una cerveza y a dormir.
Tercer día
Para el tercer día ya había conocido la mayoría de lo que quería conocer en Praga, estaba de vacaciones y mi cuerpo lo sabía era momento de darle un giro a mis vacaciones o acabaría sobria, necesitaba tomar medidas serías al respecto siguiente parada Pilsen.
Tomamos un tren en la central de Praga que nos dejaría en nuestro destino, normalmente cuando compras un boleto de tren local la salida es abierto, esto quiere decir que no necesitas arriesgar tu vida en vano, esta lección la aprendí de una manera muy peculiar corriendo como loca y dando un salto excepcional para mis pequeñas piernas tratando de a subir en ese tren, para la gente de estatura promedio tal vez con un paso largo hubiera sido suficiente, mientras realizaba esta hazaña veía la cara de Geo que reflejaba un sentimiento de sorpresa y confusión al pobre no le quedó de otra que unirse.
Recuerdo muy bien el paisaje la mayoría rodeado de nieve fue hermoso el recorrido y muy entretenido ya que era la primera vez que apreciaba un paisaje lleno de nieve y a esas alturas parecía divertido. Recuerdo que a medio camino una señora la cual medio sonrío cuando entro a la cabina, estábamos a punto de llegar a nuestro destino y pensé que sería educado despedirme de la señora con un “See you later” ¿Nos vemos luego? No es una despedida que puedas tener con una persona con la que no has cruzado ni una palabra a veces me pregunto porqué actuó de forma rara.
Pasando esta introducción eterna del tercer día, él cual aproveche para hablar de mis traumas llegamos a la parte interesante. Pilsen en mi diccionario definido como “lugar donde nace la cervezas Pilsner Urquell”, este lugar no es tan turístico como Praga y por lo tanto la gente no es muy amigable, para darte cuenta de esto no necesitas moverte mucho de hecho saliendo de la central puedes sentir el cambio. La cervecería de Pilsner Urquell no está muy lejos de la central de trenes para llegar solo es necesario esquivar a unos cuantos gitanos que se acercan para pedir dinero, seguí el sabio consejo de Geo como ¡No hagas contacto visual¡. La cervecería tiene tour en inglés a lo largo del día, para los tour en Español hay que hacer la reservación con tiempo y juntar cierto número de personas, no tengan miedo tomar el tour en ingles aun si no entienden mucho les paso mis tips:
- Cierra un poco los ojos como mostrando mayor interés.
- Finge que te importa más ver tu entorno que prestar tanta atención al guía.
- Inclina la cabeza de lado como si estuvieras pensando en lo que está explicando el guía y debes en cuando haz un gesto afirmativo.
Realmente el tour vale mucho la pena y al final te dan a degustar cerveza sin filtrar, esa cerveza solo la podrás conseguir en este recorrido y en el restaurante de Pilsner.
Saliendo del recorrido pensé que sería buena idea buscar el restaurante y conseguir un poco más de esa cerveza sin filtrar que había logrado despertar un sentimiento de felicidad y amor en mi corazón. Camine y camine sin éxito muchos lugares estaban cerrados y ya faltaba poco para que empezara a oscurecer, con el peso del fracaso sobre mis hombre camine de regreso a la central de trenes a esas alturas el cuerpo ya me pedía comida.
Llegamos a la central y teníamos 30 minutos para comer, vi un restaurante que parecía la mejor opción ¿Qué podría salir mal? Entre y el único ruido que se escuchaba era el de los platos y pensé “Si si que lugar tan tranquilo” tarde aproximadamente un minuto en darme cuenta de que no era bienvenida, una de esas veces como cuando tus amigas están hablando mal de ti, llegas y dice “¿Qué onda? ¿Qué hay?” y se quedan callados y dicen nada, a diferencia de que no eran mis amigas, no me dijeron nada y me veían con cara de ¡sal ahora!, todo eso pasó como en dos minutos.
Por fin de regreso en Praga y como era el último día tenía que despedirme como se debe con una buena comida y una buena Cerveza en U Medvidku era el lugar perfecto ¡Producen su propia cerveza y la comida es excelente¡. Yo me despedí con unas deliciosas brochetas, aros de cebolla y papas y una cerveza estilo Pilsen.
Geo se despidió como los grandes con medio pato salvaje acompañado de sauerkraut (col agria), pan y una cerveza tamaño familiar.
No te pierdas ninguna actualización
Suscribete a la lista de correo y recibe nuestras novedades.
Continua leyendo con nosotros. Podrían interesarte los siguientes artículo: