Enero 21, Cuarto en Roma, 21:08
Estamos en Roma, después de pasar la noche en el camino por tren. Es incomodo el camarote inclusive para dos personas, ahora si que no es como en los dibujitos que ponían en el sitio web, nada de eso, es una pecera aquello. En Munich me quede en el Nymphenburg, así que la verdad no me gusto, eran pocas salas, y muy, pero muy, deteriodado lo tenían. De ahí fuimos a comer a Agustiner y después a esperar el tren. Resumo por que ya quiero dormir. Mañana describo el Coliseo y la primer impresión de Roma.
Enero 22, Cuarto en Roma, 8:47
Esperamos el mistico desayuno a la habitación, cuantos lujos con estos europeos. Ayer paseamos muy temprano en Roma, casí desde las nueve, eso explica mi agotamiento de ayer. Encargamos las maletas en recepción, y tomamos Via Cavour rumbo al Coliseo y demás zonas arqueologicas. En el camino nos dimos cuenta que Roma es como la Ciudad de México en Europa, algo sucia, llena de vagabundos, tráfico de locos y esa sensación rara como estar en México de nuevo, muy curioso. El recorrido es relativamente corto, aunque las calles suben y bajan demasiado y cansan.
El Coliseo si impresiona al verlo desde afuera, pero si es más pequeño de lo pensaba, no es tan grande y colosal. Tomamos la visita guiada, para aprovechar más, pero no hubo mucho que aprovechar. Algunos datos aleatorios, explicaciones, justificaciones y “dibujitos”, fue lo que nos dio la guía en 40 minutos. El edificio esta en los cimientos, y al parecer como que no importa mucho mantenerlo, hay bloques de mármol con grabados apilados, arrojados y no más. Salimos del Coliseo al Palatino para tener lo mismo. Un gran jardín con ruinas, donde no había láminas de explicación, ni nada, solo caminamos un buen rato tomando fotos de ruinas hasta que salimos del otro lado en el monumento a Vittorio II (o algo así). De ese punto regresamos al hotel, pero antes nos empacamos de mucha pizza y cerveza.
Enero 23, Cuarto en Roma, 8:37
Me encuentro esperando que Rox termine de vestirse y que llegue el desayuno. Me dio una alergía en la piel en el tren Munich a Roma, mucha comezón. El día antes de ayer, después de la pizza y cervezas, seguimos paseando por las calles de Roma, donde extrañamente me pierdo con relativa facilidad, y terminamos en la Plaza Barberini que conecta con Via Veneto, la calle popular y fresa de Roma. Via Veneto esta llena de tiendas caras, cafes-restaurantes muy bonitos y grandes, hoteles incrustados en viejos edificios. Todo muy agradable por esa avenida, que termina en un gran parque cuyo nombre no entendi. El primer punto que me llamo la atención del parque fue una estatua con el nombre Byron, cuya persona parecía mucho a Lord Byron. Tengo que investigar el tema. Habia mucho árbol, estatus y fuentes, un buen relax audiovisual a la concurrencia de esta zona del Termini.
Al finalizar esa noche pasamos a un pequeño restaurante a unas cuadras del hotel a comer un plato de pasta y una botella de Prosecco (que extrañamente cuesta 10 euros en casi todos lados), y del cual me volvi adicto, es broma, me gusta pero hasta ahí.
Mientras que ayer comenzamos el día con desayuno en la habitación, el cual fue absurdo, pero es “gratis”. Pan dulce, café, jugo de kinder y unas microtostadas con imitación nutella. Una vez empacados, tomamos camino al Vaticano, por medio del metro. Curiosisdades de Metro Roma, solo tiene dos líneas (me recuerda cierta ciudad), las estaciones son feas e imposibles de entender, el precio esta bien.
Enero 24, Cuarto en Roma, 7:55
Terminando de arreglar todo para salir a Florencia, lo bueno que es un tren de hora y media de alta velocidad. Todo va bien, pero me falta describir la visita al Vaticano, y el resto de Roma. En el metro tomamos la línea A para el Vaticano, y después de bajarnos estabamos incluidos en una masa de turistas que se dirigían al Vaticano. El centro del Vaticano (Plaza San Pedro), tiene accesos de control con detectores de materiales peligrosos. Increible aqui los españoles, parece que nunca habían visto uno de estos arcos, porque les explotaba la cabeza. La plaza y la catedral de San Pedro no se me hicieron tan grande, de nuevo el efecto Hollywood altero la perecepción de como son las edificaciones del mundo real. La plaza tenía un arbolito de navidad y un nacimiento, se me hizo raro pero luego entedería el porqué.
Enero 26, Tren a Milán, 13:52
Hoy será un día de mucho tren, este es el primero de tres, la ruta es Florencia, Milán, Zurich, Amsterdam. Incluyendo uno nocturno, en segunda clase, de miedo. Retomare los días en Roma después de los días de Florencia. El camino en tren a Florencia fue muy breve y comodo en el tren Eurostar. Al llegar, caminamos en sentido contrario al hotel, como siempre, que en realidad estaba a menos nada de la terminal.
Florencia es una ciudad coquetona, no cuenta con las modernidades de otras ciudades, pero su arquitectura y urbanización son peculiarmente buenas. El primer día, después de dejar las maletas, caminamos al mercado central (a media cuadra) a probar uno de los platos que quería disfrutar, el lampredotto y la trippa. Ambos son pancita (menudo) servidos en pan o en caldo, muy bueno y barato. Comimos en da Nerbone, que es una institución de la comida toscana dentro del mercado. Bien servidos, comenzamos a deambular en las calles de Florencia, como era temprano, decidi que fueramos al punto más lejano de lo que veríamos en la visita. Recorrimos Florencia hasta el río, que no recuerdo el nombre, para pasarlo y comenzar a subir en el mirador de Miguel Angel. Rox casi muere, yo solo un poco, con la subida que si esta algo entretenida pero la vista lo justifica. En el mirador se alcanzaba a apreciar el centro historico de Florencia de forma esplendida, muchas fotografías tomamos. Tomamos un ligero descano, y continuamos colina abajo rumbo al centro de nuevo. Paseamos por gran parte de las calles que conectan el Duomo, la galería Uffizi y las diversas piazzas de la ciudad. Muchos cafés y tiendas con rebajas. Rox se sentía como en Navidad. Nos detuvimos en un café, para disfrutar de una pastry y un espresso, como hacen los locales, para continuar con la cena en un restaurante cercano al hotel.
Yo pedi el bistecca a la florentina, pero como pedí para una persona, no me dieron el corte tipo T-bone original. Aún así muy bien el corte servido, mientras que Rox pidio menú armado que consistia en pasta con ragú, y un fritomisto de verduras y pollo (decía conejo pero nunca lo vi). Todo acompañado de dos litros de vino de la casa. Si salimos mareados, no lo negare, pero Rox mucho más, y todavía me insistio que compraramos otra botella y fuimos un prosecco de 7 euros bastante bueno porque era extraseco. Bebimos en el cuarto y por milagro no terminamos crudos al día siguiente.
El dia siguiente (o sea ayer), aplicamos una dosis similar de Nerbone, y mucha caminata. Paseamos por el Puente Viejo, y sus joyerías exageradas, y por otras calles de la antigua Florencia. Lo mejor del día es que nos subimos al campanario del Doumo. Es una torre aledaña al templo de 420 escalones que de alto mide casi lo mismo que la cupula. Necesitaría Wikipedia para dar detalles concretos (aquí por ejemplo), pero lo que si puedo decir es que era alta, muy alta. La subida por los escaleras que eran muy pequeñas fue angustiante. Por suerte, esta segmentando en tres niveles y ya la terraza final. Tomamos fotos en los diversos niveles, y aunque la vista hasta arriba era muy buena, me gusto más en el mirador. La perspectica en la torre es muy centrica y la composición visual es mejor como paisaje.
De regreso, pasamos un rato en el hotel, descansando y usando el internet en el lobby, porque en el cuarto no llegaba la señal. Salimos a cenar, comí un corte con trufa fresca, y me gusto mucho la trufa. Ya veo porque es cara, de hecho el platillo si me salio caro, 18 euros, pero valio la pena. Rox consiguió su sueño de comer Pesto. Ayer solo bebimos poco, no queríamos atentar contra nuestra suerte de nuevo. Hoy desayunamos, y paseamos muy poco para no perder este tren, pues salía a las casi una de la tarde.
Enero 26, Tren a Zurich, 16:00
Creo que esto ya es Suiza baby, estamos en Chiasso, estación fronteriza. Serán unas 3 horas más entre los alpes suizos para lograr Zurich. La primer clase de este tren es bastante chafa comparada con los otros, ya veremos el siguiente tren.
Una vez concluido el escrito florentino, regreso al Vaticano. Como comentaba, entramos a la explanada de San Pedro, sin ningún asombro pasamos directo a la catedral de San Pedro, la cual si es grande, pero no enorme, es como montón de capillas en una avenida. En el mapa conte facilmente como 25 puntos. Mucho oro, mucho marmol, mucho de todo. En mi opinión es demasiado ostentoso, de hecho pasamos al museo del Tesoro, el cual es realmente impresionante. Muchas antiguedades de lujo obsceno y brillo cegador. En lo personal, no me causo ninguna impresión religiosa el Vaticano, en cambio Rox, pero iba con la idea concebida de que es el punto más catolico, y creo que eso fue. Después de cientos de fotos y varias caminadas, salimos de la catedral para vagar en el Vaticano buscando el museo pero estaba cerrado asi que nos dirigimos al Castillo de San Angelo. La ubicación, al lado del río, con su puente adornado de angeles le da un toque bastante artistico al lugar que también se nota que falta de mantenimiento (o restauración). Por dentro no hay mucho que contar más que tiene una buena vista desde la terraza, donde esta la estatua del angel. El resto son habitaciones y tuneles, y un pequeño museo del ejercito italiano con armas viejas y algunas muy bizarras, como pistolas de marfil y otros artefactos raros.
Ese día caminamos en circulos durante un buen rato, paseamos por distintos lugares turisticos y comimos gelatos de Frigadurium, que al parecer los europeos me dejaron el gusto por el chocolate con naranja, que desde República Checa descubrí. Ese día intentamos llegar a la Plaza España, pero fracasamos por desconocidas razones, al día siguiente lo logramos. Como parentesis, aqui en Suiza si hubo ajeramiento de la policia fronteriza de papeles, y nuestras estancia, les mostramos pasaportes y el boleto de conexión a Amsterdam y ya no tuvieron nada bueno que decir y se fueron.
###Enero 27, Tren a Amsterdam, 10:30 Estabamos en el CNL (City Night Line, el tren nocturno) rumbo a Amsterdam pero por error (el tren iba 40 minutos atrasados) nos bajamos en otra ciudad. Al salir de la estación nos dimos cuenta que no estabamos en Amsterdam, sino en Utrecht. Nos dimos tiempo para desayunar un panini (adios waffles) y tomamos el primer tren regional para Amsterdam. Según eso llegaremos en una media hora.
Por cierto, el tren nocturno fue la locura porque no pusieron el vagón de asientos sino de camitas de seis. La confusión y caos general se dio cuando abordamos. En mi opinión, no fue tan malo, de hecho fue un upgrade gratis, aunque compartimos camarote con dos sujetos y una ruca que parecia gitana y no me dejo dormir al principio por sus cantidades industriales de perfume. Fuera de eso pude dormir y descansar, aunque Rox jura que todos roncabamos, yo ni cuenta me di de eso.
Enero 28, Tren a Antwerpen, 12:00
Salimos de Amsterdam rumbo a Bélgica para llegar a Brujas. Nuestra estancia, en la ciudad triple X, fue breve pero nos dimos una idea de lo que era Amsterdam, canales, prostitutas y marihuana. En cuestiones culinarias, solo destacan sus papas a la francesa con mayonesa, y chocolates, y la estrella, los waffles con chunches. Que Rox comio con nutella y bananas, y yo de cerezas con crema montada, muy buenos y clásicos en la zona. Respecto a la ciudad puedo decir que es linda, pero los cafes le dan un olor muy nauseabundo, que la verdad no me agrada en lo absoluto. La zona roja es algo muy curiosa porque esta integrada en el centro con cambios radicales de giros, era ventana roja, waffles, casa con niños, patos, lotería!. Muy extraño, aparte había shows en vivo, lease porno en directo a toda realidad. Las mujeres de vitrina, eran viejas, operadas o gordas, realmente no entiendo para que le dan importancia si parecia circo de excentricidades.
Creo que, brevemente, esto fue Amsterdam, el hotel Ibis me gusto pero se me hizo chafa que cobraran el internet, pero en general muy buena recomendación. Ahora algunos datos curiosos sobre las ciudades, que no recuerdo si comente o no, pero no importa.
- Praga - La ciudad más barata hasta el momento, con la gente más guapa (absurdos ojos de color y tez blanca), más fumadora y más complicada para comunicarse.
- Viena - Aquí note la gente más amable, los nativos igualmente era gente de buen ver pero con un tipo particular de nariz achatada algo comica.
- Munich - Gente alegre y mucho alcohol (segundo lugar Praga). Se veía gente bebiendo pordoquier y casi a cualquier hora, obviamente eran vagos y jovenes punks, pero había. Rox y yo debatimos si Munich o Viena era la ciudad con más hipsters locales, a lo que considero que Munich era por sus cafés Fellow que eran como hispters centers.
Estás tres ciudades, para mi, han sido lo mejor del viaje, buena comida y buena cerveza.
Esta es la parte dos de un diario, primera parte, tercer parte, cuarta parte y ultima parte.
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